La Comisión Europea ha propuesto nuevas medidas para ahorrar a las empresas de la UE 400 millones de euros adicionales en costes administrativos anuales. Con una nueva categoría de empresas —las llamadas de pequeña y mediana capitalización— , las medidas flexibilizarán las obligaciones de cumplimiento normativo y liberarán recursos para el crecimiento y la inversión.
Cuando las pequeñas y medianas empresas (pymes) superan los 250 empleados, se convierten en grandes empresas y se enfrentan a un fuerte aumento de las obligaciones de cumplimiento. Esto puede desincentivar el crecimiento y limitar la competitividad. Las empresas de pequeña y mediana capitalización tienen menos de 750 empleados y una facturación de hasta 150 millones de euros o un activo total de hasta 129 millones de euros. Casi 38 000 empresas de la UE que pertenecen a esta categoría accederán a ciertos beneficios para pymes o a normas simplificadas .
Otras medidas clave incluyen:
- Eximir a unas 10 000 empresas, solo en 2026, del registro de gases fluorados de efecto invernadero
- obligaciones simplificadas de conservación de registros en el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD)
- eliminando las declaraciones de conformidad en papel, las instrucciones de uso y otras, acelerando así la transición digital
- formas más sencillas de demostrar que los productos cumplen los requisitos de la UE, incluso cuando no se dispone de normas armonizadas a nivel de toda la UE
- una introducción más fluida de las obligaciones de diligencia debida para la industria de las baterías.
La Comisión trabaja para reducir la burocracia innecesaria y crear un entorno regulatorio que impulse la innovación, el crecimiento, el empleo de calidad y la inversión. Para 2029, su objetivo es simplificar las normas y reducir las cargas administrativas para las empresas en un 25 % y para las pymes en un 35 %. Esta propuesta se denomina cuarto paquete Ómnibus de Simplificación . El próximo está previsto para junio de 2025 y se centrará en la defensa.