En un nuevo estudio se analiza cómo los mecanismos de autorrefuerzo denominados bloqueos cognitivos impiden el cambio, lo cual reduce la posibilidad de que los agricultores adopten la diversificación de cultivos.
Las prácticas agrícolas actuales son una de las causas principales del cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la erosión del suelo y la contaminación. Hoy en día, se reconoce ampliamente que los agricultores deben cambiar sus prácticas para abordar estos problemas. Sin embargo, a pesar de estar de acuerdo con la necesidad de tomar medidas y la forma en qué se deben llevar a cabo, el cambio es demasiado lento. En un nuevo estudio efectuado con el apoyo del proyecto Diverfarming, financiado con fondos europeos, se analiza una de las razones.