
Premios LUX del Parlamento Europeo: Intercepted
28/03/2025 | 19:30 - 22:00
El 7 de marzo comienza en el cine Golem Yamaguchi de Pamplona la primera proyección de las películas finalistas del Premio del Público LUX 2025, que concede cada año el Parlamento Europeo. Los largometrajes se proyectarán hasta el 4 de abril.
El Premio del Público al Cine Europeo LUX es una iniciativa del Parlamento Europeo y la Academia de Cine Europeo, en colaboración con la Comisión Europea y la red Europa Cinemas. El objetivo de este galardón es reforzar los vínculos entre la política y la ciudadanía, invitando al público europeo a convertirse en protagonista activo y votar por sus películas favoritas.
La elección del ganador de cada año refleja una combinación de la calificación directa del público con la de los diputados del Parlamento Europeo, siendo cada una de las partes el 50% de la puntuación final de cada una de las películas que optan al premio.
Los espectadores pueden puntuar los largometrajes a través de esta web hasta abril. Aquellos que lo hagan entrarán en un sorteo de varios premios, entre ellos, la posibilidad de acudir a la entrega del galardón en la sede del Parlamento Europeo en Bruselas.
Para obtener más información sobre los ciclos de proyecciones en las distintas ciudades, pueden consultar el contacto de los Europe Direct en este enlace.
INTERCEPTED – 28 de marzo 19:30
Dirección: Oksana Karpovych
Producción: Canadá, Francia, Ucrania
Duración: 95 min
Año: 2024
Género: Documental
Sinopsis: ¿Qué mueve a quienes vienen a tu país a hacer la guerra? Intercepted intenta encontrar una respuesta enseñándonos dos mundos paralelos. La cámara capta imágenes de destrucción en planos pausados en los que vemos pueblos, casas y carreteras de Ucrania tras librarse de la ocupación rusa. Vemos de cerca no el abismo de muerte y desolación, sino la manera en que el paisaje se vuelve a llenar de vida. Nos da esperanza y, a la vez, contrarresta la normalización del terror en los medios de comunicación. Son fotogramas en contraposición con el aluvión constante de imágenes. La banda sonora sirve de contrapunto impactante a lo largo de la película. Escuchamos las grabaciones de conversaciones telefónicas entre soldados rusos en las trincheras en Ucrania y sus familias que interceptó el servicio secreto ucraniano en 2022. Es difícil decidir qué es más abrumador: las confesiones de los soldados sobre violaciones, el saqueo y la brutalidad de la tortura de civiles y prisioneros de guerra ucranianos o las voces, sobre todo de mujeres, que desde casa son testimonios del chovinismo y el odio, la desinformación y la propaganda esquizofrénica. Sonido e imagen se miran a la cara, con aturdimiento, reunidos en un espacio cinematográfico.